EDUCAZIONE SIBERIANA

De nuevo vuelvo a asomar por la red. Ni estaba muerto ni estaba de parranda, sencillamente esta asquerosa crisis que nos han provocado hace que mientras unos no puedan trabajar aunque quieran, otros tengamos que hacer su trabajo y el nuestro. Cobrando lo mismo, por supuesto. O menos.

Si a eso unimos la dificultad para servidor de poder acceder a una conexión cibernética y el abandono en estos empeños por parte de mi querido Mr Potato, que tras un enésimo (y frustrado, por supuesto) intento de conspiración en la grada joven mallorquinista ha decidido darse por vencido (de momento) y dedicarse a menesteres más provechosos y vitales, obtenemos un descenso considerable en la frecuencia de actualizaciones de este humilde blog. Pero intentaré que siga activo y espero que vosotras, galletitas mías, estéis ahí para constatarlo. Gracias de antemano. Para comenzar el 2014, qué mejor que recomendar una película basada en un libro del que ya os hablé hace un par de años.

Tras esperar en vano que se estrenara en España, finalmente opté por ver en mi ordenador la versión original de "Educazione Siberiana", aunque subtitulada al castellano, como casi siempre, gracias a la labor desinteresada de un internauta argentino. Un agradecimiento de mi parte a él y a tantos como él. Dicen que bajarnos música y películas de internet es un robo, pero es la única manera de poder disfrutar de producciones a las que de otro modo no podemos acceder.

Centrándonos en la película, no es exactamente igual al libro, aunque respeta su espíritu, es decir, las enseñanzas de un viejo criminal siberiano a sus sucesores a los que transmite un código de honor ancestral. Aunque en una adaptación de un libro me gusta que en el filme se tomen ciertas licencias respecto a la narración original, más que nada para sorprender al lector que ya ha leído la historia como es el caso, lo cierto es que en esta ocasión desvirtúan el relato de fondo. Además se centra en una historia de amor imposible (aunque las circunstancias aquí sí son poco habituales) y de amistad rota por la ambición (tipo "Érase una vez en América") que no resulta muy original y que hemos visto mil veces ya, pero entiendo que es difícil llevar a la pantalla de un modo convencional un libro de memorias basado en vivencias aisladas, como pasaba por ejemplo con Fiebre en las gradas. Eso aparte de que el metraje podría ocupar horas y horas, y la verdad, al espectador medio como yo le da pereza ponerse a ver una película de más de dos horas de duración si no la ha dirigido Peter Jackson. Tal vez se podría haber hecho una miniserie y todos tan contentos.

Pero dicho esto, el resultado final me parece correcto y creo que la trama está bien llevada, conjuntando dos historias paralelas que también salen en el libro y que al final se cruzan, la de los recuerdos del protagonista y sus actividades militares en el ejército ruso, aunque personalmente echo de menos la violencia del relato literario y más escenas carcelarias (recuerdo que las experiencias en el reformatorio del protagonista darían para una película del género por sí solas, como el episodio de los carceleros pederastas o las rivalidades entre las distintas bandas).

Si os gusta la película y no habéis leído el libro, devoradlo como hice yo porque es mucho mejor. Y si no os ha gustado la película, leed el libro de todos modos, porque estoy convencido de que no os defraudará.

Por cierto, el papel de John Malkovich como el abuelo de Kolima está muy bien interpretado por el genial actor, pero bajo mi humilde opinión creo que con una larga barba me hubiera resultado más verosímil, no sé bien por qué.