Ya que este fin de semana me lo he pasado encerrado en casa (a excepción del sábado, debido a un compromiso familiar ineludible), aproveché para ver "Soulboy". Y la verdad es que disfruté haciéndolo. La historia, como siempre, no resulta muy original. Un folletín con toques de comedia con el proceso de iniciación a la vida (amoríos, drogas, rivalidades, el puto curro de los cojones,...) de un adolescente que, en este caso, descubre el maravilloso mundo del northern soul. Refleja lo idiotas que somos todos en esa etapa de nuestras vidas (y más adelante...). Pero la película es sobre todo un sentido y nostálgico homenaje a una época y al Wigan Casino. Eso sí, el duelo danzarín final huele un poco a comedieta americana ochentera con final feliz. Pero ya digo que lo importante es el continente, no el contenido: la estética, los "bailoteos"...
La he visto sin subtitular, pero a diferencia de otras películas que he recomendado anteriormente, no vais a echar en falta los subtítulos para nada. Es una película muy visual, sencilla en su exposición, con una ambientación soberbia, buena música y muy entretenida para una tarde de domingo. Y cortita. Lo bueno, si breve, dos veces bueno.
Molt bon comentari, jo fins ara la describia com:
ResponderEliminarun pastelón que se salva per sa música i es Wigan Casino!
No sabia que ahora era para ti un "compromiso familiar inelñudible" . . .
ResponderEliminarPuedes llamarlo como quieras. Lo importante era eludir el compromiso futbolístico.
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