RANGERS I.C.F.

Voy a hablaros de dos libros de ésos que suelo comprar en los aeropuertos con las libras que no puedo cambiar, en concreto los titulados como las firms de los dos equipos de Glasgow. El Old Firm, pero en literario. ¿Quién saldrá vencedor de mi implacable crítica? Comenzaré por el primero que leí, escrito por Davie Carrick y Martin King y titulado Rangers I.C.F.

La obra contiene un prólogo de Irvine Welsh, lo cual en principio debería ser un punto a su favor. En realidad es un libro de memorias del autor (Davie Carrick, aunque en la portada figuren ambos nombres), miembro por supuesto de la Inter City Firm, aunque combinado con entrevistas a otros componentes de la misma, en las que se abordan temas como la política, las drogas, el surgimiento del casualismo y demás. En resumen, vendría a ser la evolución de la firma en clave autobiográfica.

El libro aporta algunos datos curiosos. Por ejemplo, el del nombre. Se acabaron las discusiones sobre quiénes fueron los primeros, si West Ham o Rangers. El nombre lo tomaron de dos miembros de la ICF del West Ham y pertenecientes al BNP que iban a Glasgow a menudo. En el libro se desmonta el mito de Aberdeen Soccer Casuals, no en cuanto a haber sido los primeros en importar el estilo casual en Escocia, sino más bien en cuanto a su "ferocidad". Los del Celtic son también bastante despreciados en cuanto a su contundencia, aparte de ser considerados unánimemente como sucios, vagos, llenos de moscas,... unos costras, en definitiva. Vamos, como los balearicos, pero sin chándal de Pedro Garau. Sólo Hibernian tiene unos hooligans a tener en cuenta por todos los entrevistados.

Por supuesto, se habla de la amistad (o hermanamiento, más bien) con Chelsea, que habría surgido en 1985 de un modo espontáneo con motivo de un amistoso en Stamford Bridge, y también se citan otras amistades como Leeds o Manchester City. Pero curiosamente no se habla del Hamburgo para nada. Merece la pena el relato de uno de los entrevistados sobre lo mal que lo pasaron en París a manos de los hooligans del PSG, aunque también señala que luego no recibieron la visita de los parisinos, dejando caer que éstos son temibles en su casa pero sin fama de haber hecho viajes memorables al extranjero. En cierto modo, sería una correcta afirmación bajo mi humilde punto de vista.

Como ya he señalado, la política también está presente cuando se abordan las relaciones con el lealismo y la de algún hooligan con los grupos armados del Ulster. Pero en general, creo que el libro no aporta ningún dato realmente jugoso, y me da la sensación de que se le podría haber sacado más partido. Incluso se hace algo repetitivo porque todos los entrevistados contestan a las mismas preguntas. Y de un modo parecido, claro.

Lo que sí destacaría es el álbum de fotos y la recopilación de artículos de prensa (no nos engañemos, la parte gráfica es lo primero que miro a la hora de comprarme un libro de este tipo y escrito en una lengua extranjera) así como la selección de cánticos de la grada de Ibrox. Y las caricaturas del autor, que son muy graciosas. Y la de alguno que no es el autor...